EL AORISTO
Antes de estudiar el aoristo, debemos hacer unas consideraciones acerca del verbo griego.
1.      El
 verbo griego, en su origen, era polirrizo, es decir, tenía distintas 
raíces para indicar los distintos aspectos de la acción verbal. Con el 
tiempo se regularizó la flexión añadiendo a una misma raíz distintas 
características o transformándola por diversos medios para indicar los 
distintos aspectos.
2.      El aspecto indica la calidad verbal, esto es, la forma en que se realiza la acción y puede ser:
-          Continua: expresa la acción en su desarrollo y se muestra en las formas del tema de presente: λύω desato, estoy desatando
-          Puntual: expresa la acción en un punto  de su desarrollo y se muestra en las formas del tema de aoristo (ἀοριστός indefinido): ἔλυσα: desaté
-          Acabada: expresa el resultado de la acción verbal y se muestra en las formas del tema de perfecto: λέλυκα: he desatado, tengo desatado.
El
 aoristo expresa acción pasada y aspecto puntual, por lo que se traduce 
por nuestro pretérito perfecto. Se forma según el siguientes esquema:
(aumento) + tema de aoristo + desinencias secundarias
Como
 tiempo secundario, se construye con aumento, aunque sólo se utiliza en 
indicativo, por tanto los demás modos carecen de él, y desinencias 
secundarias.