20 febrero, 2013

Lírica anterior a la guerra. TRG


LA LÍRICA DEL SIGLO XX HASTA 1939
La poesía del siglo XX hasta el estallido de la guerra puede dividirse en dos grandes etapas: la primera de ellas abarcaría los movimientos modernista y noventayochista y la segunda el novecentismo y las vanguardias.
- El término “Modernismo” hace referencia a una serie de tendencias artísticas que revolucionaron el arte de finales del XIX y principios del XX y que consistía en la búsqueda de nuevas formas y de la belleza ornamental. 
Podemos hablar de un Modernismo canónico (influido por el Parnasianismo francés, más ornamental y sensorial) y un Modernismo influido por el Simbolismo, menos esteticista y más íntimo.  Esta última versión será la que llegue a nuestros escritores.
En España no hay un Modernismo canónico ( a excepción, quizás, de Manuel Machado), sino un Modernismo más tardío y simbolista. Estarían dentro de esta línea los primeros poemarios de Juan Ramón Jiménez y “Soledades, galerías y otros poemas” de Antonio Machado.
- El movimiento noventayochista presenta unas características propias que lo diferencian del Modernismo. La primera es que se trata de un movimiento exclusivamente español, la segunda es su carácter socio-político. Así, dentro del ambiente modernista, en España surgirá un grupo de escritores que reaccionarán ante la llamada “crisis del 98”. En los versos de Machado y de Unamuno se denuncia el atraso y la miseria del campesino castellano y se reivindica esa necesidad de regeneración nacional.

ANTONIO MACHADO (1875-1939)
Nació en Sevilla. A los ocho años se trasladó a Madrid. En un viaje a París conoció a Rubén Darío, con quien entabló gran amistad. Se casó con Leonor Izquierdo (1909), con la que viaja a París, pero allí enferma y vuelven a España. Ella muere en 1912. Tras pasar por Baeza y Segovia tuvo que exiliarse a Francia al estallar la Guerra civil (aliado de la causa republicana). Allí murió.
Su poesía
Creó una poesía de intensa emoción y gran introspección. El tiempo será uno de los grandes temas machadianos: le interesa el tiempo vivido. Su poesía nace de un sentimiento de angustia ante el paso del tiempo. Los otros son el sueño y el amor: el sueño es la única forma de conocimiento para él. En su poesía se incorporan amargas alusiones a la falta de amor. Para él, poesía es “palabra esencial en el tiempo”: quiere decir que se propone expresar lo esencial, las realidades más profundas sin desligarlas del tiempo.
Su estilo es sobrio y claro. Su lenguaje poético se va depurando hacia la sobriedad y la densidad.
“Soledades, galerías y otros poemas”
En 1903 publica “Soledades”, en 1907 se amplía con el nombre de  “Soledades, Galerías y otros poemas” y se suprime lo demasiado sonoro, que es sustituido por un sentimiento más íntimo y sencillo.
Los temas de las “Soledades” son los de toda su producción: el paso del tiempo, los sueños, la juventud perdida, la muerte, Dios...
Es característica la forma del diálogo: con las estaciones, el amanecer, la noche... que aparecen personificados y a los que la voz poética formula preguntas para las cuales no suele existir respuesta.
Algunos de los símbolos machadianos que encontramos en sus poemas son: la tarde (símbolo del declive y del decaimiento); el agua y la fuente (símbolo que expresa la antítesis alegría/dolor); el huerto y el jardín. Serán símbolos de realidades profundas, de estados de ánimo o de obsesiones íntimas.
“Campos de Castilla”
Publicada en 1912 y aumentada en 1917. Junto a temas ya conocidos, aparecen paisajes y gente de Soria, junto a meditaciones sobre la realidad española: 
  • El paisaje parece recogido objetivamente, pero pronto se percibe la sintonía entre paisaje y alma.Machado proyecta sus sentimientos sobre aquellas tierras.
  • Hay una actitud crítica que dan testimonio del atraso y la pobreza de Castilla y España.
  • Ahondará en la crítica social, especialmente en versos escritos en Andalucía, donde las desigualdades e injusticias le parecen más hirientes.
  • Poemas inspirados por la muerte de Leonor, composiciones breves tituladas “Proverbios y cantares” y el largo romance “La tierra de Alvargonzález” pueden ser destacados. 
El estilo ha avanzado en el camino de la depuración. Sin eliminar los rasgos modernistas, el tono es ahora más adusto, más recio.
“Nuevas canciones”
Publicado en 1924. En él hay paisajes, poemas de circunstancia y unos poemas brevísimos que revelan cómo las preocupaciones filosóficas de Machado han pasado a primer término y se ha iniciado su decadencia poética. 
Su poesía posterior es escasa y no forma un libro. Sólo citaremos: “Canciones a Guiomar” (a un amor tardío)  y “El crimen fue en Granada” (elegía a Federico García Lorca).

En torno a 1914 surge en España una nueva generación de intelectuales, formados en universidades y de clara vocación europeísta que, reacciona contra el sentimentalismo en el arte y propone un nuevo concepto de poesía intelectual. Se les conoce con el nombre de novecentistas o Generación del 14.
Políticamente, estos autores se sitúan dentro del “reformismo burgués”. Mantuvieron su preocupación por el tema de España, pero dejando de lado la queja y aplicando el rigor y la frialdad a la hora de examinar los problemas, para buscar soluciones eficaces.
Presentan un nuevo tipo de intelectual cuyos rasgos son: no son bohemios (su vida es ordenada); son universitarios, se muestran objetivos y racionales, se dirigen a una minoría culta e intelectual, están abiertos a ideas nuevas (europeístas) sin olvidar el problema de España. 
JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
 A esta corriente de poesía nueva pertenece la “poesía pura” de Juan Ramón Jiménez, una poesía desnuda e intelectualizada. Juan Ramón Jiménez fue un autor que entregó su vida a la poesía y a la búsqueda de la belleza. Su poesía se caracteriza por: es una poesía minoritaria, hermética y difícil; está en constante creación y es definida como un triple deseo (de belleza, de conocimiento y de eternidad).
Su Proceso de creación es una constante búsqueda de la expresión poética perfecta. Se distinguen las siguientes fases:
  • Etapa sensitiva (hacia 1915): pasa por varios momentos. Empieza con una fase de aprendizaje, con poemas de recuerdos e influencias (con influencias becquerianas); sigue con una primera sencillez, donde aparecen influencias simbolistas y acaba en el Modernismo, con predominio de la adjetivación, presencia de elementos sensoriales...
  • Etapa intelectual (hasta 1936): se produce un cambio radical cuyas principales novedades son: el alejamiento de la estética modernista, elimina lo superficial, poemas breves, métrica de versos corto, desaparecen evocaciones al pasado...
  • Etapa de suficiencia (desde 1936): poesía cada vez más esencial y desnuda, contenido muy concentrado, símbolos muy difícil, temas predominantes: Dios, Naturaleza, Belleza, Perfección.

VANGUARDIAS
Hay muchos rasgos comunes entre las Vanguardias y el Novecentismo: ambos forman un gran movimiento artístico y tienen como finalidad la reacción contra la literatura anterior. Se diferencian en que la reacción de las Vanguardias es más radical y violenta. 
El movimiento de Vanguardia no fue un movimiento unitario, sino formado por un enorme número de movimientos, que comparten el deseo de crear un arte radicalmente distinto.
  • Características generales: antitradicionalismo, arte intelectual que desprecia las emociones, arte minoritario, busca la espontaneidad, la contradicción, sus herramientas principales son el humor y la metáfora.
  • Los movimientos de Vanguardia son: futurismo (ensalza la civilización mecánica y técnica); el Cubismo (propone la descomposición de la realidad en formas geométricas); el Dadaísmo (pretende instaurar la expresión original, absurda y fuera de toda lógica); Surrealismo (busca descubrir la realidad por medio del sueño y la escritura automática); Ultraísmo (resume todas las vanguardias mediante la ruptura del discurso lógico y la introducción de innovaciones tipográficas); Creacionismo (busca crear la realidad en el poema, crea una nueva realidad que tenga sentido en sí misma).

Un nombre clave es el de Ramón Gómez de la Serna, introductor de las primeras vanguardias en España. Son los primeros pasos hacia un vanguardismo que tendrá en torno a 1920 sus primeras manifestaciones propias con el Ultraísmo, cuyo manifiesto se debe a Rafael Cansinos Assens y del que participarán Guillermo de Torres, Juan Larrea o Gerardo Diego, entre otros. El Ultraísmo suponía la ruptura definitiva con los excesos verbales del Modernismo, eliminando del poema los elementos narrativos o sentimentales y realzando la importancia de la metáfora o el humor. Algunos autores establecen los antecedentes de la vanguardia de nuestro país en la visita del chileno Vicente Huidobro a Madrid. Su venida estimuló a los incipientes ultraístas y su Creacionismo influyó en autores como Juan Larrea o Gerardo Diego. Por último, hemos de citar el ensayo de Ortega y Gasset “La deshumanización del arte”, cuyos postulados de necesidad de una poesía pura alejada de los sentimentalismos decimonónicos dieron base teórica a esta nueva lírica. 
Poco a poco, estos ideales de pureza de las vanguardias se fueron abandonando. Tras los cambios sufridos en la sociedad del momento y por influencia del Surrealismo francés, la poesía española sufre un proceso de “rehumanización del arte”. Ahora se hablará de “poesía impura” y se reivindicará una poesía que sirva para liberar al hombre. 

Sin duda, los poetas que protagonizan este panorama son los del llamado “Grupo del 27”: un grupo de jóvenes reunidos en torno a la Residencia de Estudiantes de Madrid y que elevarán el género poético a cumbres difícilmente superables. Sus miembros son: Jorge Guillén , Pedro Salinas, Rafael Alberti, Federico García Lorca, Dámaso Alonso, Gerardo Diego, Luis Cernuda, Vicente Aleixandre, Manuel Altolaguirre y Emilio Prados.
Casi todos ellos tienen poemarios escritos antes de 1930, en los que combinan lo culto con lo popular y la tradición con la vanguardia. 
En torno a 1930  el grupo sufre la influencia del Surrealismo y de la poesía social y comprometida. En esta línea de poesía rehumanizada  está “Los placeres prohibidos” de Cernuda; “Espadas como labios” de Aleixandre; “Poeta en Nueva York” de Lorca y “Sobre los ángeles” de Alberti. En lugar aparte hay que poner la lírica amorosa de Salinas y sus poemarios “La voz a ti debida” y “Razón de amor”.
Será el estallido de la Guerra Civil española lo que trunque la evolución poética del grupo, posicionado al lado del bando republicano. García Lorca será asesinado ese mismo año, el joven Hernández morirá en la cárcel, y el resto de poetas del grupose verán obligados al exilio. Vicente Aleixandre y Dámaso Alonso se quedarán en el “exilio interior” y serán los encargados de, esquivando la presión de la censura, apadrinar a los poetas de las siguientes generaciones.

PEDRO SALINAS
Nació en Madrid y murió exiliado en los Estados Unidos. Poeta, profesor y crítico, destaca por su poesía amorosa, sobre todo gracias a dos libros fundamentales: La voz a ti debida y Razón de amor
Para él, el amor es algo que da sentido pleno a la vida. Pero lo más personal de su poesía es la agudeza con que ahonda en el significado del amor. Su estilo se caracteriza por la densidad conceptual y emotiva.
JORGE GUILLÉN
Nació en Valladolid. Fue profesor de diversas universidades en España, Europa y EEUU. Murió en Málaga. 
Su primer libro, Cántico, expresa su entusiasmo, su gozo por vivir. Para él, “el mundo está bien hecho”.
Más tarde, en Clamor aparecen las disonancias del mundo: el dolor, la injusticia, la muerte. Entonces, matizará: “Este mundo del hombre está mal hecho”. 
Estos dos libros, junto a otros tres posteriores, serán incluidos en “Aire Nuestro”. 
El estilo de Guillén es denso y está rigurosamente trabajado. 
GERARDO DIEGO
El santanderino poeta y profesor, sorprende cultivando en su trayectoria poética una poesía vanguardista y tradicional simultáneamente. En la primera línea cultiva el Creacionismo, con libros como Imagen; en la segunda, cultiva poemas tradicionales, romances, sonetos..., en libros como Soria.
VICENTE ALEIXANDRE
Poeta sevillano, Premio Nobel en 1977. en su trayectoria se distinguen varias etapas: 
1ª visión muy pesimista: el hombre es la criatura más desvalida del universo. Todo ello se expresa en un lenguaje difícil, con imágenes de tipo surrealista. 
2ª etapa iniciada con Historia del corazón: supone un giro hacia una nueva concepción: el hombre es visto de forma positiva.
3ª etapa, representada por Poemas de la consumación, afronta con voz serena la vejez y la cercanía de la muerte.
LUIS CERNUDA
Nació en Sevilla y, tras la guerra, vivió y enseñó en Inglaterra, EEUU y México, donde murió. Cernuda reunió sus libros bajo el título La realidad y el deseo. Su poesía surge de un doloroso choque entre sus anhelos (el deseo) y los límites que le impone el mundo (la realidad). Fue un inadaptado, un solitario. Ese carácter solitario explica su singularidad en en grupo del 27, su estilo propio y personal dentro del grupo.
RAFAEL ALBERTI
En la obra de este gaditano (El Puerto de Santa María) asombran su variedad y su maestría. En ella conviven lo popular y lo culto, lo tradicional y lo vanguardista, la poesía pura y la poesía política. 
A los 15 años se traslada a Madrid, donde se siente desarraigado. De la añoranza de su mar nace Marinero en tierra
Sobre los ángeles es un libro que se inscribe dentro del Surrealismo. A éste, le sigue una etapa de poesía social y política con títulos como El poeta en la calle. Y, tras la guerra, tuvo que vivir exiliado en Argentina o Italia. 
FEDERICO GARCÍA LORCA
Nació en Fuentevaqueros (Granada). Entabla relación en la Residencia de Estudiantes con poetas y artistas. Marcha como becario a Nueva York. Funda la compañía de teatro “La Barraca”. Fue asesinado en 1936.
Su personalidad nos ofrece una doble cara: por un lado, su vitalidad y simpatía; por otro, un dolor de vivir. De ahí que en su obra aparezca como tema central la frustración o el tema del destino trágico. (Junto a manifestaciones de gracia bulliciosa).
En sus primeros libros su estilo está formándose. La temática es variada, pero domina ya su hondo malestar. Luego, compone Poema del cante jondo, Canciones y Suites: hay en ellos poesía pura, ecos vanguardistas, pero también nostalgias y temas trágicos. 
El Romancero gitano se publica en 1928 con gran éxito. Lorca convierte a lo gitano en un mito en que se encarna el citado tema del destino trágico. En los romances aparecen personajes al margen de  un mundo hostil, marcados por la frustración o la muerte; sus ansias de vivir se estrellan contra convenciones y trabas. 
Poeta en Nueva York incorpora un acento social a su obra. Los poemas son gritos de dolor y de protesta. Ahora la frustración no es sólo del poeta: ha sintonizado con millones de seres humanos.