TELEDETECCIÓN
Es la técnica que permite la observación a distancia y la obtención de imágenes de la superficie terrestre desde sensores instalados en aviones o en satélites artificiales.
Componentes de un sistema de teledetección
a) Sensor. Situado en un avión o satélite. Son aparatos que detectan la energía del espectro de radiación electromagnético emitida por un cuerpo. Muchos satélites incorporan sensores multiespectrales que detectan energía de diferentes longitudes de onda.
b) Flujo de energía detectada por los sensores. Es la radiación electromagnética (fotocopia). Dependiendo de la energía utilizada se distinguen dos tipos de sensores:
- Pasivos. Utilizan la energía emitida por los objetos. Esta energía procede del Sol, y es reflejada por la superficie terrestre, o bien absorbida y posteriormente emitida por lo cuerpos (vegetación, agua, etc.).
- Activos. Emiten radiación y captan su reflejo, como el radar o el sonar.
- Pasivos. Utilizan la energía emitida por los objetos. Esta energía procede del Sol, y es reflejada por la superficie terrestre, o bien absorbida y posteriormente emitida por lo cuerpos (vegetación, agua, etc.).
- Activos. Emiten radiación y captan su reflejo, como el radar o el sonar.
c) Centro de recepción. La imagen obtenida por el sensor (imagen analógica) se transmite a tierra en forma de imagen digital (códigos de 1 y 0), donde son captadas por una antena. La información recibida es procesada mediante programas informáticos y distribuida para su uso.
Aplicaciones de la teledetección
Permite obtener un gran número de imágenes y la observación periódica de la superficie terrestre. Por lo que permite establecer comparaciones temporales y detectar variaciones en una zona concreta. Se utiliza para estudios de: avance y retroceso de hielos y desiertos, cambio climático, agujero de ozono, meteorología, riesgos de inundaciones, localización de bancos de pesca, identificación de cultivos, etc.
Fotografías aéreas
Se obtienen desde un avión (también desde satélites). Utilizan la reflexión natural de la luz (captan el espectro de radiación visible).
Son imágenes de gran detalle y fácilmente interpretables al corresponder con la visión ocular normal.
Pueden ser verticales (las más utilizadas) que permiten la visión estereoscópica y oblicuas que se utilizan para imágenes de edificios y ciudades.
Son imágenes de gran detalle y fácilmente interpretables al corresponder con la visión ocular normal.
Pueden ser verticales (las más utilizadas) que permiten la visión estereoscópica y oblicuas que se utilizan para imágenes de edificios y ciudades.
La visión estereoscópica
Se realizan dos tomas del mismo territorio, en dos pasadas distintas y con diferente ángulo de incidencia, de forma similar a las imágenes tomadas por cada uno de nuestros ojos. Las dos imágenes del par tienen un recubrimiento de 2/3. La observación se realiza con un estereoscopio y las imágenes que se ven reflejan el relieve real.