3. RIESGOS
ASOCIADOS CON LA GEODINÁMICA INTERNA.
3.1. Vulcanismo.
a) El fenómeno
volcánico.Las erupciones volcánicas son uno de los fenómenos más espectaculares
que ofrece la Tierra,son una prueba evidente de la energía interna de nuestro
planeta. El volcán clásico o volcán centraltiene forma de cono cuyo vértice
corresponde al cráter que es lugar de salida del magma queasciende por la
chimenea volcánica procedente de una cámara volcánica. Otros volcanes
sonfisurales, es decir, la salida de magma no se produce en un punto sino a lo
largo de una fisura ogrieta que puede tener kilómetros de longitud.
El magma es un
fundido de roca que se encuentra a unos 1000 ºC, se forma en zonas profundasy
asciende hasta acumularse a varios km de profundidad en las llamadas cámaras
magmáticas. Enellas permanece hasta que la presión que se acumula en su
interior le empuja a subir, recorrer lachimenea volcánica y salir por el cráter
provocando una erupción. No todos los magmas tienen lamisma composición y eso
influye en su viscosidad y en su explosividad. En general los magmasmás fluidos
(poco viscosos) se caracterizan por sus temperaturas muy elevadas, la escasez
deelementos volátiles y su bajo contenido en silicio.
Los volcanes se
encuentran distribuidos de forma irregular por el planeta. Hay amplias zonas
sinningún volcán mientras que otras regiones presentan mucha actividad
volcánica. En general, losvolcanes se disponen en alineaciones que coinciden
con los límites de placas por lo que el origen delos magmas puede explicarse
utilizando la tectónica de placas:
• Muchos
volcanes se concentran en las zonas de subducción porque el rozamiento entre
placasdesprende calor y hace que se fundan las rocas; la fusión se ve
favorecida por el aguacontenida en los sedimentos oceánicos que subducen. El
magma así generado asciende yprovoca la aparición de volcanes en las
cordilleras perioceánicas (por subducción bajocontinente) y en las islas
volcánicas resultantes de la subducción bajo litosfera oceánica.
• Las dorsales
son cordilleras submarinas que deben su origen a la existencia de
cámarasmagmáticas que hay bajo ellas. En este caso el magma no aparece por
calentamiento de lasrocas sino por una disminución de la presión sobre ellas.
Generalmente las rocas de las capasprofundas no están fundidas, a pesar de
estar muy calientes porque se lo impide la granpresión a que están sometidas.
En cambio, en las zonas de dorsal la litosfera se adelgazamucho, disminuye la
presión y las rocas funden.
Algunos volcanes
no aparecen en bordes de placas sino en situaciones de intraplaca porque
sondebidos a la presencia de un punto caliente. Llamamos así a determinados
puntos, que están fijossobre el manto de la Tierra, donde se ha producido un
sobrecalentamiento debido a una corriente demateriales a muy alta temperatura
procedente de la base del manto (pluma térmica). Si la litosferaoceánica está
sobre el punto caliente se forma una isla volcánica y si la dinámica de las
placasdesplaza a la litosfera sobre el punto caliente aparecerá otra isla
volcánica, después otra y así sucesivamente hasta formar un archipiélago
como el de Hawai.
Los materiales
expulsados por los volcanes se pueden clasificar atendiendo a su estado físico
ensólidos, líquidos y gaseosos. Los productos volcánicos sólidos se llaman
piroclastos y, a su vez, seclasifican por su tamaño de grano: cenizas que son
las partículas más finas (del tamaño del polvo),lapilli que es del tamaño de la
arena o de una grava fina y bombas que son las partículas de mayortamaño. Los productos
líquidos se denominan lavas y pueden ser muy diferentes en su viscosidad:las
lavas más fluidas originan superficies suaves, ligeramente arrugadas (lavas
cordadas) mientrasque las lavas viscosas dan lugar a terrenos muy irregulares
(malpaís). Los productos volcánicosgaseosos
pueden emitirse con violencia durante el paroxismo de laerupción o en
forma de fumarolas durante períodos de calma; algunas emanaciones son muy
tóxicascomo las de azufre (solfataras).
La variedad de
volcanes es grande y un mismo volcán se puede comportar de formas muydiferentes
a lo largo de su historia. Por eso, es más práctico considerar los tipos de
erupción que sepueden resumir en dos: actividad efusiva y actividad explosiva.
En
la actividad eruptiva efusiva o no explosiva predomina la salida de lavas que salen del crátera modo de una fuente, y fluyen ladera abajo con calma, sin lanzamiento de
piroclastos y sinexplosiones porque no
hay gases. El edificio resultante es un cono muy amplio (volcán en escudo)porque las lavas son muy fluidas y se alejan mucho del
cráter, sobre todo cuando la colada avanzabajo las costras volcánicas de erupciones previas. Este tipo de erupción
se denomina hawaianaporque es frecuente en los volcanes de Hawai.
La
actividad explosiva se caracteriza por la violencia de sus erupciones y su
carácterimprevisible. Esto se debe a la
presencia de gases que se acumulan en el interior de la cámaramagmática hasta que su presión abre vías de salida
para el magma. Además de gases se desprendenpiroclastos y lavas. Se pueden diferenciar, de menor a mayor
explosividad: erupcionesestrombolianas,
erupciones vesubianas y erupciones plinianas. Las erupciones plinianas son muypeligrosas porque se libera una gran nube de gases a
altas temperaturas, una nube ardiente, querecorre las laderas de volcán a gran velocidad arrasándolo todo a su paso.
Eso fue lo que le ocurrió ala ciudad
romana de
Pompeya que fue arrasada, hacia el año 50 d.C., por una nube ardienteprocedente del Vesubio que mató a todos sus habitantes; a continuación
una lluvia de cenizasenterró toda la
ciudad que quedó oculta durante siglos.
Un
caso especial de erupción explosiva es la erupción hidromagmática, en la que
participa elagua, ya sea subterránea o
del mar. Si el agua entra en contacto con el calor del magma, se alcanzael
punto de ebullición y se forman grandes cantidades de vapor de agua que, por su
carácter gaseoso,favorecen las erupciones
explosivas.
Otro
caso a destacar es el de las llamadas calderas, que son grandes depresiones
circulares devarios kilómetros de
diámetro que aparecen en regiones volcánicas. Se forman por hundimiento delterreno como consecuencia del vaciado de una cámara
magmática. El hundimiento puede ser muyrápido,
a modo de colapso, y cuando sucede en una isla volcánica puede generar una gran
ola otsunami
b)El
riesgo volcánico. Predicción y prevención.Muchos de los fenómenos descritos son peligrosos para las personas y sus
bienes materiales.Algunos peligros se
deben directamente a los volcanes como las lluvias de piroclastos, las coladasde lava, los gases tóxicos, la formación de calderas
y las nubes ardientes. Otros peligros sonderivados
como los tsunamis que originó el Krakatoa (Indonesia) en 1883 que provocaron
miles devíctimas en costas alejadas
muchos kilómetros del volcán. También son riesgos derivados loslahares, corrientes de lodo producidas por la fusión
de hielo o nieve de la cumbre de un volcán queentra en erupción; 25.000 habitantes de la ciudad de Armero (Colombia)
murieron por los laharesprocedentes del
Nevado del Ruiz. Otro riesgo derivado de un volcán es el desarrollo dedeslizamientos y avalanchas como consecuencia de los
temblores que acompañan a la erupción.
La
energía de un volcán es incontrolable. A lo más que podemos aspirar es a
predecir lacatástrofe y a aplicar las
medidas preventivas que reduzcan los daños. Es importante conocer elpasado de la región: la historia nos informa de los
lugares de mayor peligro, del tipo de erupciónmás frecuente y nos permite calcular el período de retorno, es decir cada
cuanto tiempo se produceel evento catastrófico. En España, por ejemplo, sólo existe
actividad volcánica
en las IslasCanarias y aunque la última erupción fue
la del Teneguía en 1971existen muchas manifestacionesde vulcanismo atenuado y
en cualquier momento puede iniciarse una nueva etapa eruptiva. En otroslugares
de España no hay actividad volcánica aunque la hubo en un pasado remoto: en
Olot(Gerona) hay algunos conos volcánicos inactivos de hace más de 10.000 años,
más antiguo es elvulcanismo de Campos de Calatrava (Ciudad Real) y aún más el
de Cabo de Gata.
La información
histórica se debe combinar con un estudio topográfico de la región, que
informasobre los cauces posibles para lavas y lahares, y con un estudio
meteorológico que diga cuáles sonlos vientos que pueden afectar a la dispersión
de cenizas. Toda la información se puede trasladar aun ordenador y obtener un
mapa de peligrosidad en el que se clasifican las zonas según el fenómenoque
pueden sufrir y su gravedad. Además hay que tener en cuenta la exposición, es
decir la cantidadde personas y bienes materiales que pueden sufrir el fenómeno
volcánico. Combinando un mapa depeligros con un mapa de exposición se obtiene
un mapa de riesgos, una herramienta fundamental entoda la tarea preventiva.
Así pues, se
puede predecir con bastante fiabilidad cuáles son los lugares de riesgo
volcánicopero, ¿cuándo sucederá la erupción? Existen algunos precursores de la
erupción que se puedendetectar con la tecnología adecuada. Los más importantes
son los siguientes:
• Temblores. Se
detectan con sismógrafos.
• Ligeras
deformaciones del terreno, leves cambios de inclinación. Se detectan con sensoreselectrónicos
y GPS.
• Cambios en los
campos eléctricos y magnéticos.
• Cambios en la
composición química de las fumarolas.
• Cambios en la
temperatura y en la composición del agua subterránea.Las medidas preventivas de
la actividad volcánica son aquellas que eliminan el riesgo porqueevitan que
afecte a las personas y a sus bienes:
• La ordenación
del territorio, es decir, establecer qué uso se debe dar a cada zona:
zonasagrícolas, zonas urbanas, zonas peligrosas en las que no debería haber
presencia humana. Laordenación del territorio se realiza a partir de los mapas
de riesgos.
• Establecer los
sistemas de vigilancia (detección de precursores) que avisen del peligro con
laantelación suficiente.
• Medidas de
protección civil: sistemas de alarma y evacuación de la población. Esto
requiereque haya una buena coordinación entre los científicos, los responsables
políticos y losmedios de comunicación.
• Reducción del
nivel de los embalses.
• Desviar
corrientes de lava.
• Seguimiento de
las nubes de ceniza que pueden afectar al tráfico aéreo